Escrito por Amanda Villaseca
En el auditorio de la Facultad de Ciencias Sociales, se realizó un conversatorio con el psiquiatra sobreviviente del nacismo alemán y la dictadura cívico-militar chilena, Gunter Seelman. En esta ocasión, expuso sus vivencias y la forma en que pudo sobrevivir a tales experiencias traumáticas. Además, se dio la oportunidad a quienes asistieron al conversatorio, de hacerle preguntas sobre su carácter resiliente, conocer más detalles sobre su historia y las enseñanzas que aquellas experiencias le dejaron.
Contrastando experiencias
Gunter se refirió a la comparación sobre cómo se abordó la violación de derechos humanos en Alemania y en Chile, señalando que existen diferencias y similitudes. Para ambos países destacó la brutalidad y el uso de fuerzas armadas para castigar a su propio pueblo. Sin embargo, precisó que la principal diferencia está en el carácter racista de la Alemania nazi, en la cual se miraba en menos a otros pueblos. En suma, aseguró que, se utilizó la guerra con el único propósito de poder ampliar su poder, a diferencia del dictador Pinochet, a quien cataloga más modesto en comparación, según las proporciones del daño causado a nivel mundial y las millones de muertes a consecuencia de la guerra.
En cuanto a cómo los ciudadanos de cada nación analizan estos oscuros procesos de historia de sus países, Gunter reflexionó sobre la existencia de una diferencia en la actitud de ambos pueblos, sobre lo cuál señaló que “yo creo que sí, yo diría que los alemanes, yo tengo una visión de lo que hicieron durante 11 años muy cercana y todavía cómo voy, viajo periódicamente a Alemania, sé lo que pasa allá y sé lo que pasa aquí y creo que estamos en realidad en un ciclo de cambio como nunca y que es muy peligroso y que se asemeja en algo al clima que reinaba en el mundo antes de la segunda guerra mundial”.
Preocupación por el progreso
Además, se refirió a una preocupación latente en él, que es un vacío entre el progreso técnico/científico y el desarrollo espiritual de la especie humana: “Eso nos está dañando porque no tenemos un criterio armónico y homogéneo en todo el mundo para aprovechar esos adelantos positivamente y no meternos en más problemas, esa es una realidad, creo que no haya pasado, resulta que los problemas ecológicos son productos no hechos y entonces eso es prácticamente el resultado de esa asincronía”.
Con respecto al propósito y el sentido que Gunter le otorga a sus vivencias, declaró no ser el único que haya sobrevivido, si no que hay muchos más, recordando también a sus compañeros que ya no están. Finalmente, señaló que una de las principales motivaciones para seguir adelante, tanto para él como para quienes lo acompañaron en muchos momentos oscuros de la historia, luego de vivir tales horrores a lo largo de sus vidas, ha sido la determinación de estar movilizado para lograr mantener y conservar la democracia.